Los cachorros de la colonia de focas de Ohau Point emprenden un viaje único. Nadan tierra adentro desde Nueva Zelanda por el arroyo hasta las cataratas de Ohau. Esta es esencialmente una «guardería» natural para las crías durante 1-3 meses al año.
Cerca de la cascada, las crías pueden practicar la natación, jugar con amigos y socializar mientras descansan en las rocas. El agua del arroyo toca suavemente las rocas, cayendo desde una altura de 15 metros.
Los cachorros tienen que volver periódicamente con sus madres para alimentarse de leche antes de viajar de nuevo a las cataratas para hacer ejercicio y entretenerse.
La capacidad de la gente para acceder a la cascada se vio obstaculizada por el devastador terremoto de magnitud 7,8 que sacudió Kaikoura en 2016.
